Medidas preventivas apropiadas para controlar la epidemia de Covid-19.

Prevención de los contagios.

A tenor de los hallazgos señalados en la literatura, podemos afirmar que el Covid-19 es altamente contagioso dado que: su transmisibilidad (RO) es elevada (entre 2,2 y 2,6 personas por caso) y el tiempo de duplicación de los casos nuevos corto, de 4-5 días. Además, el contagio del virus se realiza persona a persona principalmente por las gotitas Fulgen respiratorias. Ante dichas caracteristicas, para evitar el contagio y la progresión de la epidemia, se deben tomar rápidamente las medidas eficaces para evitar el contagio. Naturalmente, necesitamos conocer los tipos de medidas, su eficacia y las restricciones que requieren.

1.- Medidas de control eficaces que no restringen las libertades y derechos individuales.

Todas ellas se instauraran de inmediato, las prinicpales son: 1) Mantener un distanciamiento adecuado entre las personas. Esta medida es imprescindible y será de metro y medio entre los sujetos en reposo y mayor, hasta de 3 metros, haciendo ejercicio. 2) Limpieza de las superficies contaminadas dada la supervivencia del virus en ellas. 3) Realizar siempre la limpieza de zapatos, alimentos y cualquier instrumento  utilizado; a dicho fín se empleara un producto desinfectante cualquiera, casi todos son útiles y con legía es suficiente. 4) El uso de mascarillas y  de guantes ha sido muy discutido y cambiante a lo largo de la epidemia. La utilidad de las mascarillas en los enfermos parece indiscutible, para no contaminar las personas y el ambiente, pero es más cuestionable su uso en las personas normales, aunque lo creemos conveniente y, desde luego, se deberían usar mascarillas y guantes, por lo menos, en espacios cerrados y ante contactos estrechos o ambientes contaminados. 5) Lavarse las manos es imprescindible y debe ser profundo, de veinte segundos de duración mínima, y frecuente. Cualquier tipo de desinfectante es efectivo, incluso el jabón es suficiente. No olvidemos que el lavado de manos cuando se instauro entre los cirujanos fue la medida más eficaz para disminuir las infecciones quirúrgicas. 6) El aislamiento de los casos (ciudadano enfermo) y la puesta en cuarentena de los contactos (ciudadano potencialmente enfermo) aunque son restrictivs son imprescindible desde el punto de vista sanitario y, por tanto, es una estrategia obligatoria; la salud es uno de los derechos fundamentales. El estado de cuarentena se aplicara tanto a los contactos directos como a los indirectos.

2.- Medidas restrictivas que comprometen la libertad y los derechos del ciudadano.

Estas solo se pondran en marcha tras sopesar detenidamente si son beneficiosas y estrictamente necesarias. las principales son: 1) Cierre de establecimientos públicos: escuelas, centros de estudio, Universidad, parques, cines, teatros y cualquier centro responsable de contacto estrecho. 2) Cierre de lugares donde se produzcan aglomeraciones que facilitan mucho el contagio que, por tanto, es una obligación sanitaria para evitar que la epidemia se dispare. 3) Prohibir las concentraciones de gente en la calle (huelgas, manifestaciones) que debe realizarse tras los primeros casos conocidos. Lo contrario disparará la epidemia como ocurrió en nuestro País tras la manifestación feminista del 8 de Marzo y las concentraciones futbolísticas de días después. 4) Disminuir los desplazamientos entre países afectos, mediante la suspensión de vuelos, trasportes marítimos y controles en las fronteras. Solo así impediremos la transformación de epidemia en pandemia. 5) El confinamiento de la población es la medida más restrictiva. Solo debería ser puesta en marcha cuando las medidas anteriores fracasen y deben ser establecidas mediante la declaración de estado de alarma (restricción) o de excepción (abolición). las dedicamos un comentario a continuación

La cuarentena y el confinamiento.

La  cuarentena y el confinamiento son las medidas que más comprometen la liberad y los derechos de los individuos y según los datos disponibles su eficacia es controvertida. Por ejemplo, sabemos que la cuarentena impuesta a los pacientes que habían tenido contacto con el de virus de la influenza y el SARS-CoV-1, no controló del todo la epidemia. Tampoco las medidas de aislamiento implementadas en Corea, en el año 2.015, durante la epidemia de MERS-CoV, fueron eficaces del todo, ya que persistió la transmisión nosocomial (19). Sin embargo, existe un argumento que respalda su utilidad; durante la gripe que atacó los Estados Unidos en 1918, se demostró que las ciudades que implementaron un fuerte control (cierre de escuelas, prohibición de reuniones públicas y otras formas de aislamiento o cuarentena) disminuyeron el curso de la epidemia y redujeron la mortalidad total de la población, en comparación con las ciudades que adoptaron medidas de control más lasas. El estudio demostró que a mayor control más eficacia preventiva. Por consiguiente, los datos sugieren que la eficacia de las medidas de control (incluido el aislamiento y la cuarentena)  depende de la intensidad del control impuesto y, sobre todo, de su cumplimiento. Por tanto, aunque continua la controversia, probablemente, las medidas preventivas son armas a tener siempre en cuenta y, cuando la epidemia no está controlada, se procederá a indicar la cuarentena de los pacientes y los contactos, así como al confinamiento de la población en riesgo.

4.- La retirada de las medidas preventivas.

Una vez instauradas estas últimas un problema importante es cuando y como retirarlas; recomendamos que sean paulatinas, a fin de evitar el problemas las recidivas (nuevos focos) y el recrudecimiento de la epidemia. Sin embargo, la retirada será lo más precoz posibles para minimizar los problemas económicos y sociales derivados del deterioro laboral, social y sentimental que asocian estas medidas tan restrictivas. de todas formas, siempre estaremos vigilantes a las recidivas locales.

Por otra parte, evitar los contagios masivos de la población asocia un problema específico: la mayoría de la población no desarrolla inmunidad y estará expuesta a un nuevo rebrote de infección. En estos casos es muy importante determinar si se trata del mismo virus o un nuevo virus mutante, para lo que es fundamental secuenciar los nuevos casos de recidiva.

Prevención de la expansión de la epidemia.

La infección por el Covid-19, iniciada en diembre en wuhan, fue primero local, pero se extendio rapidamente; el número de casos sufrió un crecimiento rápido, inesperado, que sorprendió a todos los niveles. Probablemente, debido a dicha sorpresa, la prevencion inicial fue muy deficiente, y no se pusieron en marcha medidas de control inmediatas para frenar el crecimiento. El resultado fue que la infección se extendió, rápidamente, a toda la región y se convirtió en una epidemia local. Después, en pocos dias, se extendio a otros Países, de tal forma que la OMS alerto a finales de febrero del riesgo de la misma, y el 11 de marzo del 2.020 (4) anuncio que debería ser categorizado como pandemia. Confirmando este diagnostico, el 4 de Abril estaban infectados 1.051.635 personas, en 208 países, con más de 75.000 muertes (5).

Las medidas de control como la prohibición de los desplazamientos por aire y mar entre los países, tan frecuentes en nuestra época, se tomaron tarde, ya que el número de casos incrementando rápidamente primero en Europa y después en EE.UU. Sin duda, en esta dinámica pudo influir la pasividad de los expertos Europeos, pues reunidos en asamblea tres días antes del incremento en Italia afirmaron que el peligro en Europa era escaso. Los expertos debieron considerar que el modo de transmisión de virus, de persona a persona, suponía un riesgo elevado de crecimiento. Menudos genios.

Las medidas de control de la epidemia por paises.

Los EEUU y china, junto con muchos otros países, restringieron los viajes internacionales, pero la medida fue tardía y  diferente en cada País. De hecho, el 26 de febrero en China se habían confirmado 78.191 casos y 2.918 casos en otros 37 países o territorios, indicando que la decisión se tomo tarde.

En esa fecha, en EEUU solo se habían diagnosticado 14 casos relacionados con viajes a china o contactos con viajeros, 3 casos repatriados de china y 42 casos de ciudadanos americanos repatriados de un crucero. Sin embargo, se relajaron las medidas preventivas creyendo que EEUU no se afectaría (a pesar de las cifras señaladas) y disponía de medios sanitarios suficientes para combatirla. Fueron incapaces de ver   que, a la luz de lo ocurrido, ya tenía en casa la epidemia. Lógicamente, con los datos del informe de China deberían haberse preparado para una explosión también en EEUU.

Una actitud similar fue la de Europa, donde sólo tres días antes de la explosión de la epidemia en Italia, los expertos Europeos para el control de las epidemias acordaron que el riesgo para Europa era bajo, entre ellos el Dr. Simón, nuestro experto en alarmas sanitarias. Estamos convencidos de que hubiera sido apropiado, ya entonces, adoptar medidas de mitigación como distanciamiento social, aislar personas enfermas (quizás voluntarias) cerrar escuelas, evitar aglomeraciones y controlar desplazamientos dentro de lo posible. No se hizo y de aquellos barros estos lodos.

Las medidas de control realizadas en Italia

Las tomaremos como ejemplo de control deficiente. Este país inició medias preventivas al tercer día del primer caso (20) pero fueron escalonadas, cuando deberian haber sido definitivas. La escalada de la epidemia y de las medidas tomadas se resume así:

  1. El 18 de febrero, 2020, se admitió en la urgencia de Codogno (provincia de Lodi, Lombardía) un paciente con neumonía de causa no identificada (dudosamente el paciente numero 1 de Covid-19)
  2. El día 21 de 2.020 (día 1), el paciente 1 es confirmado como caso de Covid-19, mediante PCR viral. Se investigan los contactos y los posibles contagios y al final del día se confirman 16 casos en Lombardía y otros dos en Véneto.
  3. El 23 de febrero (día 3) como no se demuestra unión de los casos con viajes a china del caso 1, aumenta la hipótesis de transmisión local. Además, un segundo grupo de casos se descubran en Véneto (provincia de Padua). Se identifican como foco de infección 10 municipios de Lombardía y uno en Véneto, y dichas áreas se ponen bajo cierre vigilado. Restricciones sociales son recomendadas en Lombardía, Emilia-Romana, Véneto, Friuli-Venezia Giulia, Piedemonte, y la Provincia Autonoma de Trento
  4. El 8 de Marzo, 2.020 (día 17) se cierra del todo Lombardía y 15 provincias del norte de Italia. En el resto de Italia se ponen en marcha medidas de distanciamiento entre las personas. Una falta de ley implementando dichas medidas produce una reacción de pánico y las personas huyen del norte de Italia buscando otras zonas no contaminadas
  5. El 11 de marzo, 2020 (día 20) se instituye el cierre de toda la nación, con restricciones severas de la movilidad y contacto personal en todo el país. El crecimiento observado debia haber advertido a los demás paises que cuando se detcta un caso la epidemia esta ya muy avanzada y todas las medidas de control son pocas. Pero no hay mejor ciego que el que no quiere ver.

Las medidas en España.

La respuesta social y gubernamental ha sido tardía e inapropiada, por lo menos en nuestra opinión. Sin duda, buena parte de responsabilidad tiene el ministerio de Sanidad que no respondió con la celeridad pertinente; sin duda, se equivocaron y pensaron que la epidemia se controlaría sola, como había pasado con otras anteriores, sin considerar la evolucion en el pais vecino. El   Dr. Simón, el experto gubernamental (epidemiólogo) se permitió el lujo de afirmar que la epidemia no llegaría a España, cuando ya teníamos un caso y cuando la epidemia ya estaba en escalada en Italia y se habían tomado las medidas señaladas. Es más, está lumbrera, en una entrevista en televisión se permitió el lujo de afirmar que si su hijo le preguntara si debía ir a la manifestación feminista, le diría que hiciera lo que quisiera. Si eso no es hacer propaganda de la manifestación que venga Dios y lo vea.

La equivocacion del experto podía deberse a varias causas, a saber: 1) no había aprendió nada de los virus, no es raro el se dedicaba a la malaria; 2) podía ser que estuviera reacio por el exceso de alarma producido durante la epidemia de Ébola, en la que participo, 3) tambien puede ser que siguiera consignas ideológicas sectarias por los gobernantes de izquierda, tan comprometidos con la manifestación de igualdad de género y los eventos deportivos. Sea cual sea la causa de su actitud, se comporto como un científico de pacotilla.

Por consiguiente, parece evidente que los responsable sanitarios y gubernamentales españoles suprimieron las alarmas iniciales, dilatando las medidas preventivas y permitiendo la propagación de la epidemia. Sólo  una vez sobrepasados por el número de casos despuess de la manifestación del 8 de Marzo, reconocieron su gravedad y entonces reaccionaron de forma exagerada, con intervenciones autoritarias, tomadas con prisa para encubrir sus errores. Sin embargo, al no haber sido previsores carecian de medios materiales y humanos para frenar la epidemia (guantes, mascarillas, camas normales y de UCI, respiradores y tantos otros). las prisas aumentaron sus errores.

Obviamente, ante las nuevas prisas, la gestión de sus recursos fue nefasta; información a la población tendenciosa, cargada de ideología, recomendaciones de aislamiento equivocadas (basadas en la clínica cuando sabíamos que los asintomáticos también contagian), adquisición desastrosa de protectores, carencia de recursos materiales como camas, y personales como profesionales. No hablemos de los medios intangibles pues ha sido muy tangible su ineficacia. Deberían haber seguido a la organización mundial de la salud (OMS) que declaro, a finales de febrero, que la infección por Covid-19 era una emergencia de salud pública de interés internacional (4) tras constatar que el 25 de febrero de 2020 habían sido documentados 81.109 casos confirmados globalmente. Probablemente le hubiera pasado a cualquier gobierno, pero que le pase a la izquierda descorazona; claro que no son izquierda verdadera.

Conclusión: Está claro que el control de la epidemia ha sido inapropiado en todos los países y España se lleva una medalla a la ineptitud y de la mortalidad. La dinámica de la epidemia lo corrobora: la infección inicialmente localizada en Wuhan, se transformo rápidamente en epidemia, seguidamente en pandemia y aún, aunque controlada en la mayoría de los países, no ha desaparecido. La respuesta de China contra el Covid-19 fue rápida y con medidas preventivas de cierre poblacional y medidas preventivas agresivas, pero fueron mas lentas en los demás paises. Esperemos que los responsables hayan aprendido para un proximo brote, aunque deseamos que no se produzca.

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